Han pasado ya algunas semanas y el ciclismo sigue desangrándose. ¿ O habría que decir depurándose? Desde luego esto último suena más gratificante. Este magnífico escándalo sólo puede tener dos desenlaces: la simple reducción de una trama policial con el consiguiente castigo para responsables e implicados, o el comienzo de la limpieza de uno de los deportes más bellos del mundo y de un renacimiento largo, costoso, pero esperanzador. Y es que la "Operación Puerto" sigue su curso y, poco a poco, se van desvelando cosas del sumario. A cada paso que damos, parecemos encontrar un charco más hondo, más sucio y más enfangado. Todo esto con el Tour a la vuelta de la esquina.
Un Tour que también se encuentra en la encrucijada. Puede ser el Tour del principio de la verdad, o sólo un esperpéntico Tour lleno de incidencias y desavenencias pero sin ninguna repercusión importante para el ciclismo, como aquel de 1998 y el escándalo Festina. Para empezar, y a cuatro días del comienzo, ni siquiera se sabe a ciencia cierta la lista de equipos participantes. Ya es oficial que uno de lo invitados más destacados de la presente edición, el Comunidad Valenciana, ha sido borrado de la salidad por la implicación directa en la "Operación Puerto" de su subdirector deportivo Ignacio Labarta. Además, por si fuera poco, en los últimos días se ha filtrado que en la lista de deportistas que manejaba en sus transfusiones el cabecilla de la red de dopaje Eufemiano Fuentes, figuraban un total de, nada más y nada menos, 23 ciclistas del conjunto valenciano (prácticamente la plantilla completa).
Por otra parte, en las últimas horas el Tour ha "invitado" formalmente al equipo Astana-Würth (antes Liberty Seguros) a que se retire voluntariamente de la ronda francesa, no sólo porque Manolo Sáinz sea uno de los altos cargos de la empresa deportiva que gestiona el equipo, sino que, según nuevas filtraciones, en la lista de Eufemiano hay al menos 13 ciclistas de este equipo.
Hace unos minutos el equipo kazajo-español ha anunciado su intención de estar el sábado en Estrasburgo (salida del Tour 2006), por lo que será el Tribunal de TAS quien decida la participación del equipo, por lo que la probabilidad de que finalmente tomen parte es muy baja.
Pero ahí no termina todo. Y es que la nuevas noticias de la "Operación Puerto" salpican también a otro de los grandes. El conjunto alemán T-Mobile, quien ya había decidido apartar a el implicado Oscar Sevilla de la lista de participantes del Tour. Pero que se ha visto sorprendido por la más que probable relación de Jan Ullrich y su sangre con el célebre Eufemianio. Y es que, como adelantaron ayer los periodistas del País J. Antonio Hernández y mi venerado Carlos Arribas, es prácticamente seguro que el nombre clave "hijo de rudicio" que aparece en algunas bolsas de sangre incautadas en el laboratorio del doctor Fuentes se refiera al campeón alemán (el apodo haría referencia al conocido padre deportivo de Ullrich, el belga Rudy (rudicio) Pevenage).
Si estos últimos datos se prueban, la dirección del Tour pediría a T-Mobile (dirigido, por cierto, por Pevenage) que apartara a Ullrich del equipo o, en su defecto, no tomara la salida.
En resumen, que el Tour puede partir el sábado sin dos de los equipos más fuertes del mundo y sin dos de sus más claros aspirantes al triunfo final (Vinokurov y Ullrich). A simple vista puede parecer una lástima porque que descafeina mucho un Tour que, tras la retirada de Armstrong, prometía mucho. Pero si pensamos en el bien del deporte, puede ser menos emocionante pero mejor para todos. No debemos caer en el error de justificar el dopaje y las irregularidades por el bien del espectáculo. Ya lo decíamos en un post anterior. Si Valverde tiene que tardar tres horas en subir el Tourmalet, pues que las tarde, pero limpio, por favor.
En realidad no imaginamos todavía el alcance verdadero que va a tener todo esto, pero parece que la trama y la lista de implicados es lo suficientemente larga como para mover las entrañas de un deporte sucio que necesita urgentemente una limpieza. Nos hemos hartado de decir que basta de encubrirse unos a otros, que el mejor bien que pueden hacer los implicados es hablar y desmantelar de una vez por todas a los tramposos. Y si son todos los tramposos, pues a partir de cero. Deporte nuevo y tolerancia cero. En los últimos tiempos poco hemos confiado en que alguien tire de la manta, pero es posible que nos estemos encontrando ante el momento definitivo. Hemos clamado por que Roberto Heras hablara claro después de su positivo y es posible que lo haya hecho. Como se ha apuntado desde algunos mentideros, no es casual que la explosión del caso Fuentes-Sáinz etc. (todos muy relacionados con Heras) fuera meses después del positivo del bejarano. De hecho, y esto puede ser bastante clarividente, según algunas filtraciones lo primero que hico Manolo Saínz al testificar fue acusar a Roberto . Se sospecha que la razón de ello (Sainz siempre ha protegido a Heras) fue que Manolo piensa que fue el corredor bejarano quien, al ser "cazado", destapó toda la red en que estaba metido.
En fin, que esto parece no tener límite. Pero cuanto más largo, profundo y claro sea, mejor para todos. A ver si es el principio de la depuración...
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